Escritor- Filósofo


"La niebla es un paso del camino entre una certeza y otra certeza, jamas he caminado entre cargas y visiones falsas, debemos aprender a caminar en el umbral del camino con nuestro maestro espiritual o gurú. Debemos aprender a desafiar a la muerte y dominarla. Amar es un desafío espiritual." Emiro Vera Suárez

Todo cambia tan abruptamente. El tiempo y la vida con su paso solo develan la crudeza, solo caminan para agotarse, para hundirse ante nuestros fallidos intentos de entender algo.

Juan Carlos Vásquez Flores

viernes, 4 de junio de 2010

VIAJERO, ENTERRADO EN LOS ANDES

Las palabras no bastan, hay que cultivarla para lograr la felicidad. Debemos acariciar a las personas que utilizan una multiplicidad de lenguajes y buscar que no surga la palabra de violencia. El alma posee su propio lenguaje. En este tiempo, observamos una visión existencial antropocéntrica interesada en lo inmediato, satisfacer las cosas personales. Todo lo contrario, a experimentar un espíritu inerte que sea talante de uno mismo.
Sinceramente hay una visión desprejuiciada, espontánea del devenir histórico. Solo trato de construir una memoria histórica sobre mi visita a las tierras andinas que se inicio el 19 de abril de 2009 y finalizó el 19 de febrero de 2010. Es una genealogía de escritos donde explique el presente y la fundamentación como expectativas sobre el futuro. Es para arraigar y abrir una posibilidad de reflexión sobre uno mismo.
La existencia, es un trato que determina una postura sobre la realidad. En la antigüedad, en Mocoties – Mérida- el sacrificio era normal para alegrar a los Dioses y otras osamentas eran expuestas para anunciar el temor. Algunos historiadores exponen que era natural este tipo de enterramientos. Me explico, los enterrados en tierras andinas hasta Bolivia debían estar con la vista hacia abajo, para, que no puedan mirar al cielo y encontrar las divinidades intercesoras que lo clavaron hacia un mundo incierto. Ya que éste espíritu podía reclamar venganza.
Por lo general, es una vieja práctica de los delincuentes para protegerse en sus andanzas recopilando ciertos restos culturales prehispánicos que determinan que la persona ejecutante de ese entierro es inhumana y su alma se encuentra atrapada en un mundo de incertidumbres que determinaran una serie de causales a sus familiares. De esta manera, estas personas enterradoras tienen ya sus almas condenadas y, como ya se encuentran recluidas en sus moradas espirituales, están en una cabal dimensión coyuntural que los coloca en una travesía hostil.
Enterrar a alguien es una apología del delito, existe un solo camino que conduce a Dios. Esto es, un acto de ignorancia, desconocer como se mueven los espíritus en el plano terráqueo. Según alguien, fui enterrado en vidas pasadas en Los Andes.
La existencia es un trato que determina una postura sobre la realidad. Hoy, el género no se siente seguro. El hombre lo que construye con sus manos, lo destruye sin importarle el contexto social. Algunos resultan impotentes para asegurar su derecho, tomando en cuenta la dignidad de la persona. De modo, que al final, todos salen perjudicados porque desconocen la ley espiritual y no saben construir coherentemente su vida.
Los valores humanos, responden a las exigencias más profundas de las personas, por lo tanto, en vez de desprestigiar, debemos asumir la realización del Ser como persona humana. Estamos frente a un mundo de intereses, donde algunos asumen una posición poco contagiosa.
Y, muchas veces las imágenes abren un proceso creativo de carácter pastoral, donde la creación desborda las intenciones verdaderas del autor. Se trata de expresar o simbolizar a través del jugar con las palabras las ideas e interpretación de un camino opuesto que termina con el enterramiento del viajero.
Fantasmas que crean ambigüedad del sujeto criollo y lo que puede sentir el género, cuando sus antecesores les han menospreciado, No obstante, nos encontramos con el plano de la vida y el presente. Todas esas personas que conviven con nosotros para valorizarnos o desvalorizarnos y que determinan un elemento biológico que marca una discontinuidad cultural que esta determinada por la memoria criolla.
* Escritor. Docente de La Universidad Bolivariana de Venezuela