Tenemos que analizar de una manera muy mesurada las barbaries del capitalismo con su política impositiva y opresora que busca crear confusión en los valores de una ideología que repercute por Latinoamérica para asentar un pensamiento lineal que conlleva a transcribir unas líneas con el fin de crear expectativas y una esperanza a todo un pueblo que lucha por su ideal político.
Es necesario escuchar los discursos de cada candidato para la Asamblea Nacional y cuales son sus planes y jerarquía para implementar un campo de acción laboral. Como es obvio, la oposición sin planificación busca utilizar la pobreza como lanza de una política neoliberal. Hay que tomar conciencia sobre algunos actos que tiene un carácter proselitista. Tuvieron en sus manos la economía del Estado y la convirtieron en su botín personal. Un sector privado insiste en adversar los programas del desarrollo nacional y su compromiso para proyectar la capacidad para iniciar tareas de significación ideológica.
Las coaliciones partidistas de la oposición han sido un fracaso total y refleja una diversidad en el mosaico electoral para el próximo 26 de septiembre y, después de diez años de eventos destábilizadores, el nuevo corolario es mantener una incursión mediática contra los indecisos que todavía no han declinado su balanza, hacia un derechismo absoluto. Prácticamente, es difícil encontrar un líder carismático e inteligente que aupe la verdadera unificación del derechismo en Venezuela. Esta actitud, crea desconcierto e incertidumbre en la población juvenil que desea el encuentro y el enfoque de nuevas estrategias, porque, la derrota esta ya presente en algunos puestos de comando.
El espionaje no le ha resultado a la mesa de la unidad democrática y sus continuos viajes al exterior en busca de ayuda económica. De allí, las continuas improvisaciones propician un seguro triunfo al Partido Socialista de Venezuela en los próximos comicios y donde los recursos utilizados solo han servido para crear disidencias en el mismo movimiento opositor.
Ya los venezolanos, hemos tenido excesos por éste grupo de personajes y solo deseamos un soporte esencial para el sistema democrático y, una sola voz en la dirección de gobierno, donde la ley comunal sea verdaderamente el instrumento para la permanencia socialista en nuestro país, siendo la única manera de que una acción del Estado sea legitima y no vulnere los derechos ciudadanos, sino que salvaguarde las actividades de un colectivo, hacia un bien común.
La política es un proceso de diálogo y de hecho con una sola línea ideológica, el triunfo será a quién represente los intereses del pueblo, sin menoscabos de egoísmos. Sin duda, un tema esencial para la próxima Asamblea Nacional sería la de atacar de una vez por todas la delincuencia desatada en el país.
