Escritor- Filósofo


"La niebla es un paso del camino entre una certeza y otra certeza, jamas he caminado entre cargas y visiones falsas, debemos aprender a caminar en el umbral del camino con nuestro maestro espiritual o gurú. Debemos aprender a desafiar a la muerte y dominarla. Amar es un desafío espiritual." Emiro Vera Suárez

Todo cambia tan abruptamente. El tiempo y la vida con su paso solo develan la crudeza, solo caminan para agotarse, para hundirse ante nuestros fallidos intentos de entender algo.

Juan Carlos Vásquez Flores

miércoles, 2 de marzo de 2011

LA NOCHE DE LOS VIENTOS OLEADOS

La Tecla Fértil


Siempre la recuerdo ávida y clandestina, recorriendo los distintos laberintos de mi memoria. Yo le hablaba en árabe y francés para despertar los fantasmas de mi habitación, que se chocaban entre sí cuando la enamoraba. Ella había leído mis artículos y de una manera recurrente sonrío al bajarnos del autobús y los pasajeros fueron a sentarse en una pollera a saciar su hambre. Era una mujer algo triste, pero reflejaba verdades inconfensables en su alma, su belleza dormía en la intrepidez de su conducta. Una vez, acostada sobre la plataforma me beso sin premura, aquietando mis labios con sus comisuras, sus ojos verdes brillaban en un francés ensortijado con sus pelos que le llegaban sobre sus hombros. La religión había hecho mella en ella.
Dos cosas han maltratado mi vida, no casarme con la mujer deseada y haber sido utilizado por los protestantes. Y a partir de allí, mi tía me regalo un crucifijo, lo utilice como protesta. Por lo general, iba al mar para ver las gaviotas y los barcos en la rada y a la deriva, sus movimientos, me recordaba a mi única novia, tan fija en sus metas y sus deseos de triunfar, la última vez, me miro con mucho desden y le di una patada al piso junto al antiguo Beco de Valencia, ahora regreso por el mismo camino. Nuestra existencia, es un verdadero paradigma.
Nunca, he contrariado mis planes profesionales, he deseado lo que soy, nunca he fracasado, excepto con mi primera novia por inmadurez. Siempre como alimentos ligeros para no soñar, necesito elevarme como un pajarraco por las nubes y anunciar por las mañanas que siempre he sido feliz, es como flotar sobre el mar en el malecón de mi Puerto Cabello y dejarme ahogar por sus besos. Nunca será tarde para besar lo deseado y despertar en las noches que no se olvida. Son noches de tormentas y vientos por lo que se quiere y desea.
Así, sobrevivimos a una cultura, que, siempre tendrá su iniciación en un pueblo de la costa y compuesta por una civilización sin alma, todo es recurrente en la vida. Siempre existirá algún medio para llegar a nuestro hogar y soñar y verter un ácido sobre nuestro vaso para acabar con las fatigas de la noche. Lo importante, es convertirnos en un verdadero guerrero para sopesar la llegada a un nuevo hogar. Ahora todo es más valioso y enriquecedor, pienso que siento una gran afinidad por la vida que pasó y de seguro, estoy más sexi que cuando joven.
Mis ideas, tienen un quehacer histórico y cada noche el olor a incienso llega a mi habitación. Es el refugio de mi aprendizaje, luego de pasar por Mérida.
El día que me case acabaron con mi matrimonio en dos horas, eso son los evangélicos, la comida se la llevaron en los carros, me goce con verlos rumiar como vacas. Ahora, en el apartamento, soy más exquisito en mis gustos y saco mis vajillas para controlar mi peso. Los cubiertos se encuentran guardados, porque, ahora solo me toca aplaudir a quienes les causaron desesperación en mis días juveniles, tiempo de jugarretas y amigos que se esparcen en mi memoria como fantasmas y, se acorralan en mi habitación para acordarme de ellos.
Es bueno amar en silencio, porque refleja nuestra eternidad y de una manera visible tiene forma de corazón, lo importante es crecer bajo el manto de mi Jesús. Lo fundamental es llegar a un nivel de ser trascendente y permanecer mucho tiempo en un nivel de felicidad plena, donde podamos afirmar con tesón nuestra posición afirmativa ante la vida y tener confianza por lograr el triunfo.
Escribo todos los días, incluso los domingos, luego salgo a un centro comercial, después de aquel dialogo con mi única novia decidí no enamorarme nunca más, ahora, no se quien romperá el hielo, solo son rasgos del tiempo en el alma. Es bueno fugarse, para encontrar nuestra propia experiencia. La universidad, también es vital para mí, como el amor.