Escritor- Filósofo


"La niebla es un paso del camino entre una certeza y otra certeza, jamas he caminado entre cargas y visiones falsas, debemos aprender a caminar en el umbral del camino con nuestro maestro espiritual o gurú. Debemos aprender a desafiar a la muerte y dominarla. Amar es un desafío espiritual." Emiro Vera Suárez

Todo cambia tan abruptamente. El tiempo y la vida con su paso solo develan la crudeza, solo caminan para agotarse, para hundirse ante nuestros fallidos intentos de entender algo.

Juan Carlos Vásquez Flores

martes, 29 de marzo de 2011

FRANCIA, LA HORA MISTERIOSA

La Tecla Fértil

La historia debe cambiar su rumbo, teniendo presente las nuevas estrategias de carácter globalizado. Las cartas se encuentran echadas y la corrupción ha cifrado las basas del polémico partido oficialista que preconiza con libertad, las instancias del hombre nuevo. Lo importante es reconocer que el pasado ya no incide en las incidencias políticas de cada región y las estructuras de poder se caen por la corrupción tácita de muchos de sus miembros que conforman el buró político de una organización política determinada. Hay que homogenizar el pensamiento político bolivariano y obviar en parte a Stalin y otros jefes militares de la izquierda radical, que, motivan con sus teorías hechos fracasados, aunque resulta muy positivo leerlos. Tanto el Socialismo, como la doctrina democrática deben ir a una revisión de sus principios. Hay que olvidarse de las consignas políticas y llamar a la gente al trabajo productivo, creando situaciones favorables para ello. Para esto, se debe legalizar las vías del poder para responderle al pueblo de una manera adecuada y, por ende anular todo acto del pasado.
La gente, debe estar muy atenta, por la actuación política de sus líderes que aparecen como actividades de un sector del Poder Popular. El PSUV, todavía no ha anunciado una gran asamblea abierta desde que se inició como organización política, todo ha quedado a mesas de trabajo, una reducción financiera paras aislar al verdadero dirigente de base. Todos sabemos que el Socialismo del Siglo XXI es un proyecto socialista totalmente inspirado en el exterior y que solo busca co actualizar fechas históricas, lo básico de la tecnología y el verdadero valor de la moneda, por los movimientos que han de suscitarse en el Mediterráneo.
Hay una historia apegada al culto de nuestro Libertador Simón Bolívar y otro que propicia la corrupción a través de algunas cooperativas que están enquistadas en el poder y solo cobran dos veces al año por sus contrataciones, mientras los grupos familiares no pueden esperar mucho tiempo para sobrevivir. La democracia, nos llegó de los anglosajones y suizos, siendo Francia la menos libre de todas por el sistema dictatorial que mantiene Nicolás Sarkozy sobre las viejas comunas, regentadas por un Poder Popular artificial. Lo cierto, los franceses como los alemanes prefijan una idea y en su memoria prodigiosa, luchan para asumir ese objetivo.
Nosotros, solo deseamos estar en una organización política para ganar dinero y controlar el poder político. Repito, los países democráticos son los anglosajones y Suiza. En Alemania, Francia, España, siempre hubo dictaduras y son las que rigen la coalición y en la misma OTAN, han sido más dictadores que Gaddafi, solo que éste resulto inepto al tener todo el poder político y dinero suficiente para conformar un verdadero ejército miliciano y darle estabilidad económica.
Los comunistas en Venezuela, siempre han sido millonarios, una cofradía de jóvenes ricos y, el único que sabía de marxismo era Pío Tamayo. Con el Comandante Chávez se convirtieron en la Clase Media en Positivo y están enquistados en el poder controlando algunas instituciones del Estado y muy alejados de los pobres, prefieren reencontrarse con el liberalismo amarillo de Rómulo Betancourt y la vieja doctrina de Acción Democrática.
La memoria de Venezuela, hay que reconstruirla desde Bolívar hasta nuestros días para reencontrarnos con la experiencia y necesidad de tener una referencia materna de nuestro país. No podemos regresar al pasado, solo tenemos que radicalizar nuestro contexto geopolítico y acogernos al ideario de libertad, manejo de los códigos culturales y el avance del campo tecnológico. Lo sucedido en Libia, es una remembranza de lo que no podemos hacer con la sensibilidad de un pueblo corajudo y fortalecido en principios verdaderamente cristianos.