1.- En la Planta Termoeléctrica de La Fría, existía un pequeño pozo donde algunos pequeños compañeros se escondían para verse los genitales, luego de visitar la Casa del Pilón, que, era un pequeño restaurante y dos señoritas de la casa se repartían las ganancias por atender a una nutrida clientela que visitaban el lugar para consumir exquisitos almuerzos, muy bien preparados por una francesa, una colombiana y otra dominicana. Al regresar, eran reprendidos por sus padres para que no fuesen al lugar por los animales ponzoñosos y las serpientes. A ciencia cierta, cuando me acerque para observar que hacían, tuve la oportunidad de visualizar una competencia de la mejor masturbación y la repercusión que ocasionaría ese acto pecaminoso por la época. Todo llevaba impreso el tema tabú y el sentimiento de privacidad no era tan notorio entre los infantes.
Los padres, poco manejaban el tema sexual. Uno de ellos, obrero de la planta, iba muy de temprano cada martes a ver las revistas traídas desde Barquisimeto y que tenían un carácter pornográfico, según José Luis, sus padres deseaban practicar nuevas rutas sexuales para no caer en la repetición de las mismas poses ya conocidas. Hoy, ya es un camino trillado y todos buscan verse frente a frente para apretujarse frente al espejo de agua y conocer su verdadera fuerza de desahogo al manipularse. La hora escogida era las dos de la tarde y llevaban ropa ligera, constituían una verdadera pandillita y todos tenían un solo pensamiento al explicar las cosas y concebir una sola verdad.
2.- Nadie tenia una información cierta sobre la masturbación. El mayor, le robaba las revistas a su papá para mostrárselas a todos y esperaban la llegada de sus primos que residían en Zea para colocarlas sobre una piedra y tocarse con las manos sus genitales. En la escuela, procuraban no tratar el tema para no ser descubiertos por el maestro de guardia y los instructores de Alianza Para el Progreso que enseñaban natación o voleibol. Nadie se agredía o abusaba sexualmente, todo era una sana competencia por agrandar el pene y ser novio de algunas de las señoritas que asistían el restaurante.
Hata que un día, la maestra de grado descubrió todo y fueron a fisgonear, pero, la sorpresa es que llevaron sus shorts para bañarse con la pandilla en el río. Se cubrieron con unas franelillas que denotaban sus hermosos senos y los muchachos fueron uno a uno escondiéndose junto a una plantación de plátanos y llegaban de nuevo, ruborizados y sin ganas de hablar. Al poco tiempo, todos estaban frente al director escolar junto a las maestras.
3.- La falta de credibilidad, normas y límites forjaron ideas del pasado y llamaron al departamento sanitario al que tenía 15 años para interrogarlo, al poco tiempo, todos estaban suspendidos por 15 días y un llamado al representante. Muchos padres piensan que tienen control sobre sus hijos y es falso, no analizan sus componentes emocionales y lo aíslan creándose problemas de familia y de permisividad. El tema sexual debe hablarse con los niños. Debemos darle una respuesta adecuada a cada ítem y, el diálogo es la mejor forma de controlarlos. Hay que evitar los enfrentamientos e imponer nuestros estados de cuenta.
Detrás de la puerta no podemos permitir nada que engañe a nuestros sentidos. Deseamos hijos exitosos y que tengan buena compañía para lograr en ellos, una estabilidad emocional perdurable y llena de sueños. Hay que ser verdaderos orientadores de su vida sexual para que en ese sentido tengan plenitud de su Ser.
Nuestros hijos, den afrontar temas cada día y para esto, no deben existir sentimientos de culpa. Los muchachos y muchachas deben desarrollarse en conjunto buscando su sexualidad futura y ser buenos amigos, como hombre y mujer. Teniendo a su lado las enseñanzas espirituales de Jesús.
Hay que romper las fronteras., dejar los maniqueísmos y avanzar a la madurez, en todos los sentidos y apropiarnos de una verdad explicita y objetiva. A una experiencia trascendental y permanente en nuestro mundo interior.
