La Tecla Fértil.
La integración
latinoamericana viene evolucionando históricamente en conjunción con el
pensamiento económico y el modelo de desarrollo impuesto en la región, La actual experiencia, propuesta por el
Comandante Hugo Chávez Frías se debate en un profundo proceso de cambio y
transformaciones que conlleva a una propuesta de carácter hemisférico y de
orden subregional.. Venezuela esta sumada por su estratégica situación
geográfica y su dimensión política, económica, social y cultural.
En el año sesenta,(60),
fue el primer despegue de la integración latinoamericana y económica, siendo la
década de los ochenta completamente pérdida, porque es difícil validar la unión
de mercados compatibles entre sí y que esas transformaciones profundas deberían
hacerse gradualmente para consolidar el ideal de unidad latinoamericana, pero,
las zonas de libre comercio quebrantaron en principio éste gran proyecto,
porque los estadounidenses desearon participar en un asunto no suyo y trataron
de imponer en el transcurso de los años el Tratado de Libre Comercio y
colonizar más el Sur.
El período de los
ochenta, se caracterizó por ser una etapa de restructuración institucional de
los mecanismos de producción y actos para la integración, el Pacto Andino, el
Acuerdo de Cartagena y los países que conformaron La Gran Colombia
detallaron los pasos para la Comunidad
Andina de Naciones y la Comunidad del Caribe, luego.
En Suramérica ha
existido una falta de continuidad en los proyectos y programas de crecimiento
geoterritorial. Estados Unidos en su acción intervencionista debilitó el modelo
de integración y la carencia de una infraestructura adecuada impidió definir las competencias financieras por
región. Siempre fue y es necesario armonizar las normas de competencia en el
libre intercambio comercial.
El presidente y
Comandante Chávez Frías perfecciono con sus teorías, los bloques del sector
privado y público más allá de nuestras fronteras y en un contexto de coalición
multidimensional, incorporo variables de orden económico, social, cultural y
bursátil. La idea era construir un mercado común Sur- Sur sobre la alianza
hemisférica y Rusia, tuviese un estímulo en el crecimiento intrasubregional,
previo a cualquier proceso de compromiso global.
La dificultad en
Venezuela es, los grandes circuitos de comercialización, donde la variación de
precios en los productos es muy oneroso, porque grupos empresariales estimulados
por el par
amilitarismo se encuentran
detrás de una naturaleza de valores bancarios muy rica y generosa, solo desean
la captación de dinero fácil, sin esforzarse en la producción agroalimentaria.
Esto, se produce porque
muchas municipalidades reflejan una vitrina pintoresca, como el caso del
Distrito Valencia, donde el alcalde Miguel Cochiola es un fantasma y la zona
urbana se encuentra muy descuidada. Los burgomaestres poco se preocupan por
llevarle alimentación al pueblo que reside en su región de mando. Y, en las
bodegas de las barriadas populares y en los súper e hipermercados de
carácter nacional, los productos son controlados por los mal llamados
bachaqueros.
Todo ello, ha traído
como consecuencia que las generaciones más jóvenes apenas conozcan muchos de
los productos que, solo unas décadas fueron parte fundamental de la dieta
cotidiana de sus padres o abuelos.
El pueblo pacífico de
Venezuela, opto por un camino, la ruto de Simón Bolívar. Sus ideas se clavaron
en cada corazón para amurallarse bajo la imagen de un joven militar, Hugo Chávez
Frías. El Proyecto Bolivariano es la mejor ruta, los estadounidenses han
tratado de interrumpir éste camino, generando una teoría para la restauración
geopolítica, pero, el pueblo es generoso con los ideales del Generalísimo
Francisco de Miranda y Bolívar.
Mao Tse Tung, en una
oportunidad expresó que: “El ser social del hombre determina su pensamiento.
Las ideas correctas, características de
la clase avanzada, una vez dominadas por las masas, se convierten en una fuerza
material que transforma la sociedad y el
mundo”.
Venezuela, es una
tierra desnuda y acogedora, donde hay mucho espacio perdido. Los borricos, en
la época colonial transitaban sus calles, llevando el alimento al pueblo y sus
hombres, lo ofrecían en venta a un precio muy económico. Chávez en sus andanzas
por el interior del país nos acercó a la
existencia de un mundo que tiene su propia ceremonia ritual y nos ha dado una imagen hermosa del corazón
amazónico, que junto al esequibo es nuestro, conformaba el gran Estado de
Guayana, cuya visión se expandía en riquezas minerales y agua hasta el río
esequibo. Los ingleses querían invadir éstas tierras, pero las lanzas y espadas
guiadas por Manuel Piar impidieron la usurpación y coloniaje de éstas tierras.
Las naves filibusteras
inglesas poco se llevaron, pero, nos
entregaron a unas firmas convencionales y un grupo de colonos se decidieron a
construir chozas alrededor de los ríos y junto al mar, no quisieron regresar a
un mundo de esclavitud y servilismo.
Venezuela y América del
Sur, es tierra de Libertadores y de bonanza. Cuantos hombres, no han remontado
nuestros ríos y se detuvieron a fundar pequeñas ciudadelas a fuerza de lucha y
sangre, aquellos parajes extraños, pronto se convirtieron en pueblos con buenos
comercios y negocios con precios jamás visto.
Hasta que llegó la mala
influencia de Álvaro Uribe y los paramilitares y la destabilización.
Hemos acumulado
experiencia. El fermento social ha crecido y tenemos que ir a la autogestión
para romper con la hegemonía del mercado, el enfrentamiento ideológico debe
existir para parir la patria y tener soberanía alimentaria y tener seguridad
social a plenitud, solo el Poder Popular y Las Comunas pueden lograr éste
esfuerzo.
Los usurpadores del
poder, vienen impactando de manera negativa a las instituciones y los estudios
marcan el momento para integrar un marco analítico de la actuación de algunos
dirigentes a su propia competencia electoral y a la capacidad de los políticos
para incrementar su economía.
Los partidos
desarrollan su capacidad, para aglutinar votos y sumarlos, gracias a la
inclusión de los sectores históricamente excluidos.
Son varias las razones
que llevaron a Barak Obama a avanzar en las negociaciones con Irán y realizar
vía diplomática una concertación, con el liderazgo cubano. Es una expresión de
lectura en la geopolítica caribeña y que empieza en Washington a moderar su
actuación, ante el esequibo, para evitar una suerte de yihad global en el Cono
Sur.
El resto es historia,
porque la derecha endógena busca romper con el proyecto social del
bolivarianismo, el objetivo es crear choques de valores en la clase media y
presionar el mercado, desde la utilización de los bachaqueros para crear falsas
alarmas. Esto, forma parte de un programa de cambios, donde existe un auge de
políticas económicas neoliberales, orientadas hacia el libre mercado y busca
extinguir el proletariado a través de mecanismos financieros bien concebidos
hasta dejarlos solos en éste tiempo de vacas flacas, que se valgan de sus
propios medios en un mundo cada vez más prestado a los gobiernos de derecha o
izquierda.
Son días volátiles, el
liberalismo económico tiene muchos defensores y simplemente quieren concebir la
idea de libertad que genera como degenera, en una pura defensa la libre
empresa, pero, es una ficción, el Estado le otorga dólares para no cumplir con
la elaboración de productos y el pueblo.
La mayoría de los
políticos a nivel internacional y nacional están de acuerdo con el modelo
neoliberal y no son capaces de valorar la situación o lo que están llevando a
sus pueblos. Sencillamente, no merecen ser llamados dirigentes, porque en
realidad se encuentran al servicio de las empresas financieras.
El asunto es por normas
técnicas, hablo de las distorsiones económicas, el Comandante Chávez Frías
apeló a la fomentación de fuentes de empleo y fue un duro hostigador de los burócratas
poblados, mandó a los ciudadanos a produciré y asentarse en los campos del
llano venezolano para crear Comunas para la autonomía económica.
Entonces, debemos ver
bien, quién es el verdadero verdugo.
Se debe optimizar los
recursos humanos y, darle un adelgazamiento al Estado, los aportes deben ser
bien distribuidos para destinarlo a inversiones y mejorar la cadena de
servicios públicos. Hay más liquidaciones en espera, asegurados que esperan.
Mientras, la corrupción avanza y apunta a un costo económico muy elevado.
Tal situación, amenaza
con provocar una enorme sangría a las finanzas públicas del Estado. Hasta ahora
es moderada.
Llegó el momento de
reestructurar al Estado y promover acuerdos sobre la actuación del pueblo en la
ejecución de programas de gobierno en beneficio de Las Comunas, el Poder
Popular debe ser participe en la aplicación de políticas que teóricamente está
orientada hacia la austeridad, pero, que finalmente ahogan a la clase humilde.
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