La Tecla Fértil
Los
venezolanos poseemos una identidad cultural permanente y debemos comprender su
papel histórico para hacer respetar nuestra dignidad y naturaleza humana, esta
comprensión fortalece la historia libertadora de nuestro pueblo
Un
tema de nuestra nacionalidad es la agilidad para dar respuestas, para saludar,
para enamorar, para trabajar, esto lo pensaba cuando se hacían comparaciones
con otras personas de distinta nacionalidad; por ejemplo, Francisco Gómez de
Quevedo le dijo a Isabel de Borbón -que era coja- esposa de Felipe IV; “Entre
el clavel y la rosa, su majestad escoja”. Ante el Rey Felipe IV, este, tal vez
por venganza le pidió al poeta en su presencia que le expresará un cuarteto y
le alargo el pie, y con agudeza Quevedo dijo: “En semejante postura dais a
comprender señor, que yo soy el herrador y vos la cabalgadura”.
Ahora bien, un
mexicano distinguido, entre otros muchos intelectuales e historiadores,
maestros y catedráticos, fuera del campo ideológico, don Agustín Basave
Fernández del Valle en su libro Vocación y Estilo de México Fundamentos de la
Mexicanidad (se recomienda leerlo) nos habla de que entre el “Homo Hispanicus”
y el mexicano existe a la vez un Quijote y un Sancho y también nos menciona el
diálogo intemporal de Cortez y Cuauhtémoc del que se desprende una parte de la
forma de ser y vivir del mexicano, de su viveza, su audacia mental para
improvisar respuestas.
Nos
dice Agustín Basave que a México se le conoce por sus santuarios, sus poetas,
sus revoluciones, sus pintores, sus filosofías, por su cultura y agrega que
“Las reservas espirituales del pueblo mexicano pueden ser una fuerza apreciable
en nuestros días…”.
Así
es Venezuela, tenemos grandes reservas morales, bienes materiales y riquezas
naturales que nos dan una esperanza, nuestra gloriosa cultura, somos raíces de
una razón histórica y política y tenemos una gran extensión geográfico
compartida con un gran lago, desde el Caribe hasta el Golfo de México, donde
solo una isla no quiere integrarse, Cuba, porque desea hacerse la victima ante
un bloqueo inexistente, ya que Estados Unidos ha querido siempre dirimir este
tema, pero el gobierno de Los Castro, no le interesa fomentar el desarrollo en la isla.
José
Luis Zapatero y los esposos Clinton, después que hicieron un gran desastre en
el Medio Oriente, ahora desean dañar el hemisferio occidental trayéndose a las
guerrillas islámicas para ocasionar destabilización en todo un Continente y,
esto, hay que extirparlo cuanto antes.
Nuestro sentido
Universal de la vida nos hace más realistas, llevar la vida impregnada de
humanismo, de ahí la cimiente de nuestra grandiosa cultura. Esta se refleja,
como indicaba don Andrés Henestrosa y Cecilio Acosta, a través de dichos y
refranes, que parten de las raíces de la experiencia y sirven para orientar
criterios y hasta tomar decisiones, son filosofía de la experiencia.
El generar igualdad en una
sociedad como la nuestra, , implica impulsar esfuerzos mediante una filosofía y
principios de responsabilidad compartida. Sin duda es una práctica que han
seguido en los últimos años gobiernos exitosos de distintos países, y el de
México y
.
Y aquí es donde
entra otro elemento importante. La Cruzada Nacional contra el Hambre, que debe
emprenderse en nuestro país, es una estrategia de perturbación y malestar
social puesta en marcha por el gobierno bolivariano que tiene el propósito
básico de combatir la esperanza, nutrición y la marginación social, porque son
los bachaqueros, oficialismo y un ala militar quienes controlan ese mercado.
Los
partidos políticos no harán nada, menos los integrantes de esa comisión en
Santo Domingo, todos conocemos la imagen nefasta que representa Zapatero y como
desgrano a España, dañando su integridad y expansión geopolítica.
Todos,
debemos trabajar para el desarrollo, bajo una concepción colectiva y normalidad
democrática para la paz y, en esto, debemos ser respetuosos y firmes. La
República se realza con el esfuerzo de todos, seamos de derecha o de izquierda,
debemos unirnos para desplazar y extirpar esa lepra que es conjunto de factores
malsanos que, se cruzan en la estructura del Estado oficialista.
Hay
que ir a una Coalición, para visualizar una alianza con personajes nuevos, no, estas
piltrafas que tenemos en la MUD, que se presta al juego del trio que reside en dominicana,
Leonel Hernández, Zapatero, Bill Clinton y Torrijos, que comprendió el juego
con los árabes. Hay que lograr un mejor clima electoral y ya comenzó una guerra
asimétrica de lucha de fuerzas, sin duda el vicepresidente El Aissami y Maduro,
incorporaron fuerzas paramilitares con mayor poder en las filas castrenses para
el accionar del fuego y, los hechos por venir.
Nosotros
no somos los que apostaremos a la erosión de estas elecciones, pensando que a
río revuelto, ganancia de pescadores, Lo importante es extirpar este tumor que
tanto daño nos ocasiona, al actual régimen, que ha decidido llegar al poder con
el apoyo mayoritario de la sociedad. Pero el malandraje lo ha tomado como
escudo. En este propósito, ejerceremos nuestra libertad de expresión y
exigiremos respeto a las normas electorales. Que no nos provoquen, porque
sabemos ser firmes y sabremos contestar. Siempre respetuosos, pero siempre
firmes.
Soy
partidario de la propiedad colectiva, amante de La Constitución y no quiero
nada con Zapatero y sus viejas ideas de la socialdemocracia alemana neonazi,
todo viene de allí hasta llegar a Oscar Pérez, quien fue entregado por una
triangulación telemática y los soplones.
.Los
procesos electorales, como el único método legítimo para el acceso al poder en
democracia, son una secuencia de hechos políticos y humanos de una gran
intensidad. Precisamente por esta razón, las autoridades deben desempeñar un
rol institucional y responsable. Cuando esto no ocurre, la democracia se daña y
el quehacer político pierde legitimidad.
La
democracia es un bien social que se daña con una gran facilidad. Y muchos han
perjudicado al sistema y establecido la pena de muerte como ley. Ya lo
evidenciamos con Oscar Pérez
No hay comentarios:
Publicar un comentario
No se publicarän notas que contradigan o reflejen un criterio contraetico