Colonialismo en el proceso político de Venezuela

La Tecla Fértil.

Colonialismo en el proceso político de Venezuela

Las líneas de acción económica en Venezuela no representan una estrategia productiva culturalmente hablando que favorezca a las comunidades y, más allá nos encontramos con los intereses creados por la desconstrucción de los mecanismos del mercado a través de esa misma resistencia cultural de la mercantilización comercial de carácter industrial fomentadas por los peregrinos del acontecer empresarial de la región.

El contexto social es factor fundamental para entender la simbología de la producción agrícola y sus consecuencias. Es un trabajo de tareas específicas por géneros a cultivos específicos, según marqué el consumismo en cada ciudadano., pero, hay un grave problema, la producción de maíz, maní y arroz han sido desviadas y lo que es el granero de Venezuela, hoy constituye un gran desierto. Se ha olvidado a la población como parte de un colectivo social y nos llevan a un militarismo cautivo a una realidad social falsa llena de mitologías hacia un hombre y simbología religiosa hacia los viejos vestigios indígenas. Simplemente, los venezolanos no tenemos una hoja de ruta tanto hacia la izquierda, como al derechismo.

El proyecto del socialismo bolivariano fue tomado por un grupo de ciudadanos no socialistas que en su mayoría advinieron del partido COPEY y se fragmento en Primero Justicia y la otra, advenida del antiguo partido Acción Democrática, una verdadera configuración histórica para configurar una verdad geopolítica y romper con la soberanía del país al incluir el militarismo como factor de poder político.

Las grandes potencias mundiales nos quieren hacer ver una nueva experiencia del colonialismo. Va desde la negación de los contratos colectivos hasta la autorización que da el Banco Central de Venezuela, BCV, a la banca nacional para acordar con el Dólar DICOM. Violentándose todo derecho social por los presupuestos reconducidos ante unas devaluaciones bárbaras del bolívar.

El gobierno bolivariano, no puede estar dirigido por jugadores de bolas criollas y, quienes ignoran un concepto de desarrollo comunal en los Municipios y, quienes incorporan a su equipo de acción a algunos burgomaestres que desconocen el concepto político de bienestar ciudadano.

Necesitamos es una verdadera política agraria y económica que empuje a nuestros campesinos a la adquisición de semillas mejoradas, como a la producción nacional. Así, comenzó Evo Morales su ejercicio político, logro un verdadero cambio en su equipo agropecuario y económico, donde sus legisladores entendieron la manera de controlar y modernizar el cultivo de las tierras y la demanda laboral de sus afectos locales.

Es cuestión de análisis y sin demagogia, en el pasado, los políticos venezolanos hicieron una delicada transacción económica con Irán que nos viene quebrantando la economía hasta el mundo de hoy, afectando al sector laboral y académico. Estamos casi paralizados por las malas negociaciones que se vienen ejecutando ante esta gran verdad.

Los pensionados y jubilados son los más sensibles, asunto que debe ser revisado porque la Ley del Seguro Social es muy determinante y concluyente. La cual fue convertida en un relajo por algunos personajes políticos en busca de populismo y trabajar en el sector público para favorecer sus intereses personales.

Situación que es insostenible y carente de todo humanismo, afectando la condición alimentaria y de seguridad social para los conglomerados urbanos.

Esto, no se encripta en los principios socialistas de un Estado- Nación.

Hoy, nuestra vida social se conceptualiza en una verdadera metáfora, donde es necesario reconstruir la creatividad de los arquetipos económicos y avanzar hacia una verdadera fortaleza social para que se cumpla la necesidad de Estado.

El mismo, se desarrolla en base a una producción cierta como jerarquizada, apuntando al desarrollo de los lenguajes y a la práctica de los géneros en una urbe civilizada.

Sin duda, se debe configurar el poder y dejar a un lado el militarismo como un marco prosaico de desarrollo. Necesitamos un criterio para la preconducción de país y elevar los valores del hombre hacia un verdadero ejemplo de producción industrial.

El socialismo en su estructura ha fracasado en el país por las vías que ha venido tomando para su desarrollo, la noción de Strathern del género analógico, brinda también correctivos a la útil teoría de Iván Ilich del género vernacular sobre la producción agrotécnica y nos lleva a reflejarnos en el campo para visualizar la calidad de los campos y evitar un conflicto bélico por energía y campos fructíferos, lo que indica que necesitamos de los campesinos y mujeres venezolanas para cambiar el sentido del país y articular con mayor visibilidad los pensamientos de cada burócrata del Banco Mundial y los funcionarios de planificación de este mundo..

Estamos ante un nuevo sistema de reconciliación y una realidad plena para el existir humano. No hay escapatoria, no somos asiáticos ni un continente arábigo, somos de occidente, una población consolidada en la esperanza planetaria y su sistema. Venezuela, su sociedad debe ser diligente en cambiar todo esto incorporarse a las grandes actividades y revelar que tenemos una nueva visión del país.

Hay que investigar, conformar un nuevo estrato militar que no robe a la sociedad como el gas y en las alcabalas, enviar a los viejos políticos a sus residencias y sacar de las instituciones públicos a los malos funcionarios.

Para elevar la calidad de vida hay que irse al campo a sembrar rublos agrícolas y darle un abrazo al prójimo necesitado, así todos, haremos crecer y fortalecer un país. Necesitamos a la vecindad como factor político y de crecimiento urbano para tener  una conciencia sana y de transformación social como económica, esto es determinante, más allá de un sistema político. Sea de derecha o izquierda.