Usurpación de poderes y el eclipse Psuviano

La Tecla Fértil

Las últimas palabras de la oposición y el oficialismo, buscan estigmatizar el perfil del ciudadano común que, aún permanece indiferente a la realidad del país y esta aboca al trabajo para tener un promedio de salario que satisfaga las necesidades de su familia. Pero, la realidad, nos traslada a soportar unos esquemas sociales muy fuertes y, que constituyen la primera experiencia del venezolano, después de la dictadura del General Marcos Pérez Jiménez, lo más delicado son las constantes agresiones al núcleo familiar y desean los opositores, convertir esta patria en otra Libia e Irak.

El fin de todo, constituye fortalecer la Democracia Socialista y mediante La Constituyente, darle fuerza al Estado Bolivariano de Venezuela para corregir errores de forma en la práctica del trabajo funcional y jurídico de las jurisdicciones territoriales. Pero, es latente la amenaza de intervención extranjera, la democracia o el socialismo no interesa. Más importante es el petróleo y las fuentes energéticas, necesitamos abrir señales de convivencia social para neutralizar a los promotores del daño al país que provienen de la oposición y lo increíble, del mismo oficialismo, pero, con la ayuda de militares que juegan al sentimiento patriótico de los ciudadanos.

Ya los opositores no tienen liderazgo, Julio Borges nos vendió a las transnacionales y el otro séquito, integrado por Henrique Capriles Randosky, María Corina Machado y Leopoldo López, cobran altas comisiones de dólares por interferir en las negociaciones del país y son un corretaje de las corporaciones fantasmas que ellos, como herederos representan y cuyos propietarios son sus familiares. El pueblo, solo es utilizado para garantizar el beneficio de sus bienes e hijos en el exterior.

El pueblo venezolano es aborigen y, solo desea vivir en paz y en concordia con los vecinos, abrirse a la patria y contribuir al desarrollo nacional, pero, el hostigamiento hacia la República es muy fuerte por parte de bandidos que cuentan con el asesoramiento de ciudadanos que ejercen funciones institucionales en oficinas administrativas del Estado Bolivariano de Venezuela y algunas alcaldía claves que, hasta los momentos, se encuentran bajo el control de personas adversas al sentimiento popular venezolanista.

Nos están enfermando, es una guerra telemática y psicológica que quebranta nuestro espíritu de lucha, la semántica juega u papel fundamental en estas nuevas estrategias y vienen incorporando signos y simbologías para dañar el quehacer del pueblo en sus luchas y jornadas diarias, sobretodo, al estudiante que debe dirigirse muy temprano a sus aulas de clases. Existen grupos que aterrorizan a sus vecinos y ejercen presión para intimidar y quebrantar la paz, como es el deseo de cada uno de nosotros.

Es el momento para reflexionar e incluso la nueva Ley Laboral debe ser revisada y, en algunos casos necesarios, sí la persona no se encuentra afectada de salud, prolongar, sí lo desea, su edad de pensión y recibir directamente el benefició de la cesta ticket y rebajar en un quince, (15%), por ciento los gastos de servicios públicos y las casas de Los Abuelos, tienen que incluirse en el nuevo motor económico, todavía somos útiles y con mucho espíritu de lucha social. Nada, debe ser regalado, los bancos financieros se encuentran colapsados de regalías por tarjetas gurnamentales, esas damas jóvenes deben integrarse al trabajo en algunas instituciones como obreras y darle cupo en el caso de escuelas a sus hijos menores, para que estén allí con ellas. Esla única manera de combatir el ocio y el vasallaje a que estamos sometidos.

Los nuevos esquemas de corrupción, hay que fracturarlos cuanto antes. América Latina se encuentra tocada por hilos de corrupción, provenientes del narcotráfico y cobro de altas cifras en comisiones, por eso, el gigante Brasil cayó a los tentáculos del comercio ilícito, directamente ligado al presidente Michel Temer, quién tuvo la osadía de hacer dimitir a Dilma Rousseff de la presidencia.

Hay que romper la línea de algunos empresarios corruptos a nivel suramericano que buscan apropiarse con ayuda de las mafias de las drogas de los superávits de las empresas que mantienen corretaje de seguros con Estados Unidos de Norteamérica y algunos países del Asia, asunto que Donald Trump desea corregir en el mundo globalizado y cibernético con el Banco Mundial (BM), interamericano de Desarrollo, (BID) y las burbujas bursátiles que se anexan al Fondo Monetario Internacional, (FMI).

Se deben abrir etapas en las nuevas historias políticas del país para avanzar hacia su industrialización, Venezuela, ya no puede seguir más estancada por grupos de alocados que en su proyección, poco reflejan disciplina y pensamiento político solo fomentan la evasión de divisas y desaciertos económicos.

Aquí, es importante y fundamental, La Constituyente, pero jamás debe tener un sentido lineal de perpetuarse en el poder y los ministros deben ser relevados, acorde con su gestión social y económica, cumpliendo las directrices del presidente de la República, Nicolás Maduro Moros, elegido por voluntad del pueblo para ese ejercicio de responsabilidad, ante la patria del Libertador Simón Bolívar.

La tristeza que no, nos arrope, es el momento de proseguir la marcha. El camino es largo y fuerte, pero, se debe cambiar al que incumple normativas presidenciales. El Estado es una estructura que debe respetarse y acordémonos, la Fiscal Luisa Ortega Díaz tiene la facultad de llamar a la Asamblea Legislativa y, por mayoría suspender al presidente de la República y hacer cumplir los alegatos jurisprudenciales requeridos para accionar al Estado, según lo concebido por las Leyes de La República.

Ya estoy molesto, aunque sin odio. Un grupo de compatriotas hablan hasta lo sumo del imperialismo yanqui y, tienen bienes adquiridos en el Estado Florida, Texas y California, otros prefieren Nueva York. Son leguleyos de oficio y, en ellos hay poco poder de convocatoria, lo demás es imagen y proyecto del presidente Nicolás Maduro Moros. Es necesario restablecer el poder y avanzar hacia los procesos mecanizados del ambiente político, vigorizar los poderes públicos y quebrantar las ideas del golpismo local e internacional, mediante las logias y cofradías religiosas.

El gran problema es el capitalismo, ha influido este sistema estructural  en la vida política de muchos países progresistas,  sus hilos conspirativos teje el despotismo, buscando quebrantar la unidad de lucha, pero, la gran mayoría de venezolanos poco conocen del Libro Azul y del Legado propuesto por el comandante Hugo Chávez Frías, esto, ha originado la disolución del poder integrado, siendo en parte culpables de ésta situación la intervención desmesurada de los militares en hechos y corresponsabilidades en el acontecer nacional.

La Batalla final de todo el proceso Bolivariano se encuentra en la calle y, para eso, se debe trabajar mancomunadamente con los vecinos y escucharlos en sus planteamientos. Hay que retomar la brújula en el lineamiento del poder y dejarse de sentimentalismos, dejar a un lado el autoritarismo y militarismo para recomenzar con los trabajadores en la calle, Venezuela se encuentra desgarrada por los vivos que buscan controlar el poder, desde la visión del control alimentario.

Es una gran tarea para la Constituyente y el fascismo, debe identificarse para neutralizarlo y avanzar en los nuevos campos de la lucha social, sin duda el discurso derechista ya avanza en los sectores populares como La Vega, Gramovén, El Valle, Catia y el 23 de Enero, controlada por colectivos armados que abusan de su direccionidad popular.

Los capitalistas, de una manera progresistas vienen infectando el Legado de Chávez, en su debido tiempo no se limpiaron los canales de participación activa en los acuerdos industriales y empresariales, la entrega de dólares a diestra y siniestra nos perjudicó, sobretodo con Empresas Polar, que se burla del Estado Bolivariano a cada instante, evadiendo sus responsabilidades y esos dólares fuesen hecho una mejor papel monetario en pequeñas empresas del Estado, como Harinas Venezuela y Leche Los Andes, cuyos productos, tienen un costo a los empresarios privados.

Hay que confrontar a la derecha en todos los canales de participación y llamar a un toque de queda, para neutralizar las manifestaciones y darles el paso a los camiones de alimentos hacia el centro de país, pero, tenemos un grave problema, los agentes de la Policía Nacional Bolivariana, (PNB), así como foguea a los estudiantes, detienen a las gandolas y camiones de alimentos que se cruzan en puntos de control no autorizados. Según ley del año 2014-  y revisan, sino esta encitillados, eso lo veo a mi paso diario en el paso Flor Amarillo-  Isabélica. Entonces, jamás entenderemos la funcionalidad de un gobierno de izquierda y bolivariano. Es el capitalismo que mina las mismas estructuras del Estado. El presidente Maduro, torca el tornillo, lo ajusta más. Obviando que su imagen declina, no por el pueblo, sino por los propios gestores de la acción pública que responden a intereses pro imperialistas, de libertinaje y corrupción.

En oportunidades, se debe actuar como la lógica y la ley lo indica más allá de los sentimientos, un país jamás debe ser destabilizado por unos jocosos.

La agenda de la MUD es confusa, la del gobierno bolivariano peor, porque siendo gobierno es incapaz de controlar una manifestación, cuando antes, a los izquierdistas se les callaba la boca en apenas una hora y sin equipos de represión, lo que indica la ambigüedad de los aprendizajes en las fuerzas de choque.

Solo, queda el silencio. No juzgo. Es como, algunas personas que se dice izquierdistas y columnistas- no articulistas- sueltan sus culebras verbales contra un analista acreditado por los medios de comunicación, con indicios verdaderos de odio, egoísmo y envidia, Esla ignorancia de la misma izquierda que incumple con la ideología política y poco preparan a los camaradas, solo generalidades y lo que acontece, esto, debilita cualquier proyecto, juzgar por juzgar.

Lo más delicado, es un movimiento popular y los dirigentes políticos deben ser sobrios para desarrollar y aplicar sus programas de gobierno.

nos olvidamos de nuestros niños, ese es el gran problema. miles de pequeños venezolanos y a nivel mundial se encuentran desasistidos emocionalmente de su hogar paterno y materno, mujeres que deben de trabajar gota a gota, desde que amanece hasta el anochecer por un mendrugo  de pan,  en oportunidades  pasar entre barricadas y el fogueo de la GNB y PNB que irrespeta el derecho al venezolano de pensar en libertad, cuando vemos a un ministro de comunicación injuriar un canal televisivo ante las cámaras, observo que el fanatismo y el fetichismo religioso sobrepasa la sensatez y racionalidad en algunos personajes hacia una organización partidista, es odio sembrado en el corazón, cuando la izquierda es  emancipación y crecimiento espiritual.

Es una lucha interna del Ser por descubrirnos a sí mismo, es el nuevo reto parlamentario y el liderazgo político, descubrir esas verdades que encierra la ideología y la toma decisiones. La Constitución, aclara, que somos protagonistas de una historia y, en éste tiempo la inició el comandante Hugo Chávez Frías

Más adelante, necesitamos asentar los caminos en una sola vertiente señalada por el mochilero de Sabaneta, eso es fortalecer la patria, cuanta alegría tenía el pueblo cuando le observaba y solucionaba sus problemas, todo esto, lo agotó el militarismo que desea asesarse del poder en un proyecto muy silencioso y arriesgado, porque allí, tenemos una sociedad civil exigiendo más participación.

Cargamos en nuestras mochilas sus enseñanzas, ya no son polvos estériles, enfrentamos una realidad de guerra, dos fuerzas que se suman entre sí para desatar criterios disonantes, olvidando la experiencia del Muro de Berlín y la actitud política de las dos Coreas ante China y Estados Unidos de Norteamérica. Estamos en Venezuela en vigilia, pero, de noche llegan las tanquetas con sus lacrimógenas a perturbar nuestros sueñas y esperanza hacia una Venezuela mejor, el Estado Socialista sin dominación militar, militares debemos ser todos, con clara conciencia rural y urbana

La Constituyente, es una vía para una realidad de país, pero, leamos bien La Constitución y sigamos su ruta y pongamos el corazón a la persistencia de Jehová. Somos libres y seguiremos libres, son las voces del Che y Jesús, tengamos una sola visión de participación política.