Dejar la mentira, priorizar la Paz: ANC

Aventis

Viene quedando claro que. Raúl Castro es el dueño del circo con el que tiene que dialogar el bloque de los gobiernos de países latinoamericanos, que hicieron una declaración en Lima-Perú el pasado 8 de agosto en contra del gobierno de Venezuela, porque hay que saber ¿cuándo Cuba le va a dar la independencia a Venezuela? O es que definitivamente    anexaran a esa nación a La Habana; y aquí habrá que recordar al presidente de EEUU Ronald Reagan el 12 de junio de 1987 cuando frente al muro de Berlín le exigió al líder soviético ¡Derribe esté muro, señor Gorbachov!  Cosa que ocurrió en noviembre de 1989 con una insurrección popular, de la misma manera los gobiernos de la región le deberían exigir a Raúl Castro la liberación  de            Venezuela Las declaraciones del actual presidente estadounidense Donald Trump, acerca de no descartar una acción militar en  Venezuela,  le ha servido de munición para que  los seguidores de todo esperpento marxista leninista metan sus acostumbrados alaridos  en la cueva, creyendo en una posible invasión de marines norteamericanos, cuando sabemos que no necesariamente para USA esa es la única opción, y ya lo vimos recientemente lanzándole misiles crucero sobre una base área siria en represalia por un ataque de ese régimen a la población civil con químicos, o en abril de 1986 cuando el ejército norteamericano atacó a los palacios presidenciales en Trípoli de Muammar-Gaddafi mandatario  de Libia, y como estos hay varios sucesos de acciones militares de USA en diferentes partes del planeta que no han sido necesariamente invasiones            territoriales.

Así que no hay que tomar las palabras de Trump como una amenaza de invasión a Venezuela, más bien sabiendo que nuestro país lo ha convertido la camarilla castro-chavista en la autopista de los mil negocios, lo que sí se puede presentar es una interceptación de los aviones que salen de Venezuela para Europa y EEUU, con fines no definidos. Lo demás es producto de las mentes calenturientas de lo que llaman izquierda radical.
Definitivamente el futuro de Venezuela pasa por el colonialismo cubano, quien es en ultimas el que decidirá la suerte del país petrolero, para no entrar  en una guerra civil que necesariamente será de liberación, por ello para evitar esa confrontación, Raúl Castro como jefe del colonialismo cubano al igual que las potencias imperiales en la década de los sesenta y setenta del siglo pasado que le dieron la independencia a sus colonias en África, le debería conceder la liberación a la patria de Bolívar y así poder creer  realmente en  la autodeterminación de los pueblos, que no es como la entiende el exalcalde de Bogotá Gustavo Petro. En momentos en que el actual presidente de Colombia no debe ver la hora en que se acabe su periodo, porque han sido muchos los momentos amargos que ha tenido que vivir él y su familia, resulta por lo menos insólito que existan ya 30 precandidatos a esa altísima posición. Y es posible que aún falten algunos nombres. Igual en Venezuela

Esta explosión de nombres que aspiran al más alto cargo del país, coincide además con un periodo que sin duda será de los más complejos y decisorios de la historia moderna de este país.

El compromiso es avanzar en la reconciliación, no olvidar el pasado sino superarlo y tenerlo presente para no repetir los errores, así como defender la verdad y la justicia como una sociedad ya conocedora de las fatales consecuencias de la guerra, para que haya una recta reparación a las víctimas, que son la prioridad. Alimentemos el debate con ideas, no ataques, como ha tomado carrera en los últimos años, y que ahora cuando el Psuv- MUD entren en el ‘partido’, que los odios se depongan, pues el ayer no lo podemos cambiar, pero el presente y futuro sí son obligación de vivirlos y construirlos con sapiencia para el bien de todos y las próximas generaciones.

n el mundo hoy, se presentan situaciones muy difíles que entorpecen las relaciones interpersonales, por causa de la prepotencia de las personas que dan el aspecto de creerse mejores, que el resto y tratan a los demás como trapos sucios, además suelen mirar por encima del hombro.  La soberbia consiste en concederse más méritos, de los que una persona tiene, es la trampa del amor propio. La soberbia es la pasión desenfrenada, sobre sí mismo. Es un apetito desordenado, de la persona que descansa sobre la hipertrofia de la propia excelencia. La soberbia es intelectual y cerebral, emerge en una persona que tiene cierta superioridad, en algún plano destacado de la vida, que ha sobresalido en alguna faceta social o profesional, y que se ha instalado en esa actitud, bajo una percepción muy condescendiente, de sí mismo. 

El soberbio es, sin duda, orgulloso y vanidoso; y aunque el orgullo es más emocional  que intelectual o cerebral, esa alta opinión de la persona que aviva la vanidad, fortaleciendo la soberbia. Generalmente la soberbia y la prepotencia, afloran en el hombre y la mujer, a raíz de indicios ambientales, familiares y sociales.

Otro tema que hace parte de la danza de las verdades, tiene que ver con la doble moral; cuando una persona o un colectivo, sostienen que algo es bueno moralmente, pero hacen lo contrario, están ante una doble moral. También se habla de doble moral, para referirse a aquellas personas que rechazan en los demás, lo que ellos hacen. 

Todas las culturas tienen unos códigos de comportamientos, que permiten distinguir lo correcto de lo incorrecto, lo bueno y lo malo moralmente; estos códigos, suelen ser originalmente religiosos, pero se acaban instalando, en el  conjunto de la sociedad.

Lo curioso de la doble moral, es el hecho que este tipo de conductas, se atribuyen a los demás, pues la comunidad valora muy positivamente, desde el punto de vista de la integridad personal. 

Se debe pensar en la crítica generalizad, a la explotación laboral en el mundo, un rechazo en muchos casos, va acompañado de la compra de productos que se obtienen de esa misma explotación.
La prepotencia y la altanería, la arrogancia y el despotismo, resumen lo básico que veces son las personas, y lo elemental que ven la vida, transformándose en autómatas que van avanzando sin entender, que el entorno está compuesto por seres con sentidos y sentimientos capaces de hacer muy grato, el diario vivir.

En la medida que las personas aporten una cuota de querer a quienes los rodean, y que sean capaces de expresar con claridad y sin gritos o garabatos, que no contribuyen a la instauración de un clima armónico y de buenas vibras.

La contaminación no sólo se compone de basura y de los gases que se emanan de los distintos tipos de entidades industriales, es mucho más que esto; también se contamina, cuando las personas no son conscientes que viven en una comunidad,  y que ella se merece el respeto de sus integrantes, los unos con los otros.

Se contamina, cuando se entra en una rutina agresiva, estresante y poco acogedora, con el que se está desarrollando la comunidad.

 

.