Agua entre las montañas, hace girar el pensamiento de los inicuos.

Fuente Literaria/ Relato de Ciencia- ficción X. XII

El manejo agrícola es importante en la economía de cualquier país y, es evidente que el adoctrinamiento de las mujeres es fuerte como evidente en Zanus. Es un pequeño planeta, dominado por mujeres y aliado con el dictador, prefieren vivir a su juicio y las embarazadas reciben un dinero por su nivel de gravidez y parto. Aunque hay poco suministro de leche maternizada, las colas se hacen inmensas en las instituciones del Estado para recibir algún beneficio.

La tarde esta espléndida y el sol relampagueaba con sus luces, el trayecto corto, se alargaba porque la sofocación es fuerte., al otro lado, los esclavos cuidan de los hijos(as) de las mujeres del valle y el sol relampagueaba con sus luces.

Este verano. Estoy más flaco y enjuto. El tirano adormeció al pueblo con su propaganda mediática y las deudas limitaron la compra de alimentos, todo es importado, por eso, prefiero navegar que estar aislado en un sitio.  Ignoro, hasta cuando hemos de seguir en este juego, los gorriones siguen revoleteando junto a las águilas.

El verano, me hace pensar en mi infancia, los sábados, la familia y hermanos se dirigían al rio Borburata y Miquija a hacer hervido y nosotros correr entre el rio y jugar, todo un movimiento en vuelo. Donde los brazos y pies se extendían para abrir el buen corazón y desviar nuestro rostro hacia la realidad.

Siempre amé a Dorkas, se convirtió en una interrogante hacia mí, sobre sus pies quedaron las flores y en Orfa, los chocolates que le llevaba cada fin de semana., algunas veces se cenaba en su casa, antes de llegar de su trabajo en el hospital Rottandaro de Tinquillo. Son días imaginables entre la Universidad, mis estudios, el trabajo en el liceo y la prensa, pero Dios equilibra y da repuesta a las peticiones del corazón.

Son recuerdos.

Los cuerpos rechonchos y musculados de las muchachas le hacían caminar rápido el bosque, los esclavos del jefe, la seguían para ir a la montaña de los sacrificios. Adoraba dioses paganos anti bíblicos.

El bosque, es puro papel. Los carteles, ofreciendo dinero por los hechiceros y delincuentes se multiplicaba. Estas criaturas amorfas, conocían desde la niñez, el camino de la montaña, eran nueve kilómetros para llegar a la ciudad.

Las grietas, en los riscos, dejaban chorrear caminos de agua y niños como mujeres se bañaban en los pozones para seguir el camino hasta sus residencias.

En el rio, pasaba cada cierto tiempo, los marines de la Agustina Armario. Con sus mochilas al hombro, sube y baja diariamente.

Es el momento de partir y descubrir las luces de Dios, sobre este planeta.

Al anochecer, los grupos de cazadores regresan de entre los árboles y, al igual debo buscar agua y los cadáveres eran arrumados a un paso del camino y, el dictador los mantenía en base a alcohol, anís, sexo y regalos de bonos para mantener su fe en él.

La tierra, está llena de puras personas artificias y engañosas. Ya esta gente no se preocupa por multiplicarse, solo vivir como manada de un sitio a otro buscando alimentos, están hasta diez y seis horas en cola.

Hace meses, los cobertizos y cabañas fueron destruidos, es una guerra abierta contra cualquier adversario, quien violente la mujer o al hombre, todos deben estar en sus refugios.

Cada camino era un temporal, es decir, son de nueve a diez días por Temporal, el tiempo es imaginable, se tenía que llevar gruesos mecates, en plena selva no se podía construir una pista de arrastra para los animales, vienen muy cargados, siendo su paso lento.

Las gitanas, con sus vestidos largos adivinan el futuro., algunas, los mercaderes la compraron y trajeron a nuestras costas. Y todos nosotros, sabemos que quien cree en los sueños, también sabe interpretarlos.

Mis ojos, no se han acostumbrado a verte, aunque estoy aquí, desde hace varias generaciones. Un completo silencio se abate en el Castillo del Cerro Azul, los dragones desean pelear, los han despertado. Es necesario cruzar la frontera, el desierto y el mar. Los carteles han penetrado el corazón del pueblo y las señales dan un solo aviso, viene tristeza para nuestra causa, la lucha será feroz por el bienestar del pueblo. No habrá comida, gas ni agua.

Tengo especies y té, voy a prepararme varias tomas para dormir bien.

Necesito verte, debo dejar las ciudades extrañas, debo encontrarte para habitar en tu alma. La jarra de cristal me dirá la verdad sobre ti y, no seamos una leyenda, sino una realidad.

Esto, no es un sueño, es una realidad, debo entrar al primer día, seré tu ladrón, esta noche, debo encontrar el tesoro y caminar toda la noche para llegar a la curiara.

Cuando se ama, se llega a conocer la Creación, y solo se debe entender al viento y preguntarle al cielo, donde está su fuerza y voluntad, así estaremos ante los velos azules y los hombres de Dios, no sentimos miedo.

Estamos acorazados en su bendición.