Aventis
Al Estado le falta coraje
político, las organizaciones sociales que hacen vida en él solo responden a sus
intereses particulares y la Fiscal, en este sentido ha dado las indicaciones
necesarias para asignar responsabilidades por desacato a las afirmaciones
gubernamentales y del propio presidente de la república, dirigente obrero
Nicolás Maduro Moros. Existen muchos juicios de interpretación jurídica y los
abogados constitucionalistas, ya solo responden a afirmaciones particulares,
que, solo benefician a particulares.
Lo que, si estamos claros, es la serie
de víctimas y amenazas a dirigentes de base y campesinos socialistas, muchas
veces, denuncias que dan indicios de una presencia constante del
paramilitarismo, saqueadores y delincuente que buscan fortalecerse bajo la
sombra del mismo oficialismo

Aunque es todavía difícil
conseguir datos claros y reconocidos por todas las partes, el nivel de
homicidio y amenaza de los líderes sociales y defensores de los derechos
humanos se ha vuelto objeto de atención tanto de la prensa más mediática como
del Gobierno, que al menos lo menciona y lo discute, aunque le falta construir
políticas públicas para la resolución de tan preocupante asunto. El hecho que
este problema tan preocupante se haya hecho presente en el debate público en sí
mismo es un avance destacable, aunque falta mucho camino por recorrer.
Hay que promover la paz. Pero, el
motivo del llamado a una Constituyente, no debe ser un asunto colateral de los temas fundamentales de un país,
ya son diez y ocho años de lucha consecutiva y progresiva y, no tenemos una
patria bolivariana estable. Las quejas sobran, pero, muchas motivaciones jurídicas
han quedado impunes.
El debate sobre el tema
constituyente debió abrirse el año pasado, según el plan originario del comandante
Hugo Chávez Frías, pero, ante la falta de una política consistente, todo ha
sido creado bajo un temario muy ambiguo que tiende a crear elementos de
confusión y la Comisión de Derechos Humanos en Venezuela, es como si estuviese
ausente ante tantas realidades y los pensadores y filósofos, poco son tomados
en cuenta por este régimen.
Estamos a contracorriente,
guarimbas, fiestas cotidianas por el saqueo y ultraje a comercios que cancelan
sus impuestos y ciudadanos que cohabitan y viven una vida civil en una
constante fiesta, como si fuese nochevieja.
Lo
cierto es que, como afirma el profesor Miguel Ángel Herrera, en medio de tanto
discurso que pretende que la paz es el único futuro posible para el país, está
aumentando de manera alarmante la inseguridad para quienes están dispuestos a
disentir y a protestar. Esto, trae como consecuencia, varios procedimientos de
capturas y titulares de prensa, pero, hay una realidad. El pueblo, se encuentra
exigiendo libertad democrática en el campo político, La Constituyente debe
darse, bajo el estricto cumplimiento de otros procedimientos jurídicos, Chávez,
no la aceptaría y de verdad, deben hacerse algunas modificaciones a su
articulado, pero muy alejada, ese momento, de los golpes de terrorismo y del
hampa común, bajo el patrocinio el primero de opositores y el segundo, de
colectivos.
Tenemos,
muchas ideas, a contrasentido. Nos encontramos imposibilitados a vivir
verdaderos tiempos democráticos y, en verdad, no se que hacer ante el Valle de
Los Caídos. Es irrebatible el sentido que el grupo desea darle al gobierno
oficialista de Nicolás Maduro Moros. Siempre habrá un gesto para irritar a un
grupo de ciudadanos o, de otra manera, desean con exactitud irrebatible darle
un sentido profundo a una Guerra Civil. De verdad, doy gracias a Dios que el
opositor que saco de su pedestal al comandante Hugo Chávez Frías y quebró contra
el suelo su estructura, nadie le hizo nada.
Porque Chávez, está sobre cualquier ideal mezquino y, así lo manifestó
la ex dirigente adeca Liliana Hernández en una entrevista televisiva y le dio
gracias al 4 de febrero, dándole un puntapié a lo argumentado por Luis Alfaro
Ucero, como caudillo y el hombre que destrozó las raíces adecas.
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